Narra
Louis.
Necesitaba
tomar un poco el aire. Todavía me preguntaba por qué Maggie se puso
de aquella manera por los estúpidos reproches de Harry.
-Chicos,
- dije mientras me levantaba de mi asiento.- voy fuera, necesito dar
un paseo.
Ellos
asintieron y me dirigí a la barra para saludar a Amy.
-Allí
tienes al moreno.- le guiñé un ojo, ella sabía a quién me refería
perfectamente, Zayn. Se ruborizó y sonrió tímidamente para ir
donde se encontraban los demás.
Salí
de aquel bar adentrándome en un pequeño bosque, era precioso, un
sitio donde no había a penas gente, donde estar tranquilo. Pero a lo
lejos distinguí una sombra. Poco a poco me fui acercando a aquella
pequeña silueta, sus dedos enlazados entre sí sujetaban su mentón
y lágrimas saladas brotaban de sus oscuros ojos.
-¿Emma?-
me atreví a interrumpirle. Ella se sobresaltó y posó su mirada en
la mía. Carraspeó e intentó disimular su recorrido de lágrimas.
-Louis,
¿qué haces aquí? -musitó.
-Decidí
dar un paseo.- me senté a su lado.- Y ¿tú que narices haces aquí?
Ella
vaciló por un momento, frunció el ceño y sonrió fingidamente.
-Siempre
vengo.- no sonó muy convincente, pero asentí.
-¿Por
qué lloras? - ahora quién arrugaba la frente era yo.
-¿Llorar?
¿Qué? ¿Quién? - reí por su incredulidad. - Está bien... Vengo
aquí para alejarme de todo, y a veces necesito desahogarme, llorar
es lo único que se me da bien hacer.
Noté
ira en sus palabras, parecía que se odiase a ella misma.
-Tú
no debes llorar, no lo mereces.- puse mi pulgar en su firme mentón y
le sonreí.- Y ten por seguro que algo se te dará bien. Por ejemplo,
rechazar al mismísimo macho alfa Styles.
Reímos.
Le acaricié la mejilla, tuve que hacerlo. A nadie se le ve bien
llorando.
Narra
Emma.
Pensé
mucho sobre si decirle la verdad, pero jamás se la diría. Por
encima de mi cadáver. Louis me caía bien, era extrovertido y
amigable, no era creído, más bien ninguno lo era, excepto el idiota
de Styles. ¡Cómo lo odio! Mi subconsciente estaba hecho trizas y
echando humo en cuanto pensé en él. ¿Por qué tenía que ocupar
siempre la mayor parte de mis pensamientos? Lo odio. Lo odio. Lo
odio.
-¿Emma
estás bien? - decía Louis mientras pasaba una y otra vez su mano
sobre mi rostro. Reí y asentí.
-¿Te
apetece ir a Nando's? - preguntó esperando un sí rotundo.
-De
acuerdo, si no hay más remedio.- suspiré, después de todo, llevaba
todo el día en aquel lugar y medité lo suficiente. Nos levantamos
de la húmeda hierba.
-Hmm,
Emma...- carraspeó Louis.- ¿Sabes lo que le pasó a Maggie?
¿Maggie?
Mierda, estaría buscándome por ahí como loca.
-De
seguro que me estaría buscando.- dije segura de mí misma.
-Oh,
no. No mostraba preocupación, ella no estaba preocupada, estaba
molesta, se quedó en nuestra casa con Niall. - reí y ya sabría
como atacar a preguntas a mi querida amiguita.- Echaron las noticias
sobre un chico condenado a cadena perpetua por matar a una familia,
al parecer ella se puso de la parte del chico y Harry acabó
discutiendo con ella. Pero nada del otro mundo, solo que me pareció
frustrante su actuación.
¡Mierda,
mierda, mierda! Kevin, seguro. ¿Por qué Maggie? Como hayas dicho
algo te asesinaré. Apretaba los puños con fuerza, pero me calmé al
instante, nunca diría nada. Se tarda en ganar confianza con ella.
Sonreí.
-Seguro
que no es nada, no es difícil discutir con Styles.- él asintió y
entramos al local.
Saludé
a los chicos sacudiendo la mano. Salvo a Harry, quien coqueteaba con
unas estúpidas barbies que se pararon a hablar con él y de seguro a
pedirle su teléfono o cualquier garabato que simulara un autógrafo.
¿EMMA?
¡Qué haces con tu vida! ¿Celosa? Por Dios, cálmate. Mi
subconsciente me miraba sobre sus gafas de media luna con hipocresía.
Sacudí mi cabeza y caminé hacia Amy, se le veía muy feliz, de
seguro que ella y Zayn tenían algo, ese par no me engañarían tan
fácilmente.
-¡Rubia!
- la llamé feliz.
-¡Emma!
¿Tú por aquí? ¿Hoy? ¿17 de Marzo? Es para ver y no creer.-
añadió con énfasis mi amiga. La miré asesina y reímos.
-Ya
me molí los sesos suficiente, me pareció bastante este año.-
sonreí.
Ella
me devolvió la sonrisa.
-Ahora
dime,- carraspeé.- ¿qué narices hay entre tú y Zayn?
Se
ruborizó levemente.
-Nada,
somos amigos.
-¿Nada?
- abrí mis ojos.- Échale el diente, gatita. Se os nota a leguas que
os gustáis. Y yo no he dicho nada, lo ha dicho un pajarito.
Reímos
a carcajada limpia, era increíble que mi estado de ánimo dependiera
de ella. Amy y Maggie eran las únicas amigas que tuve para confiar.
Se
marchó para seguir atendiendo a los clientes.
El
chico de rulos se acercaba a mí a paso lento, suspiré
exageradamente. Al parecer se aburrió de las peliteñidas.
-Tranquila.-
su voz habló.
-¿Cómo
quieres que esté tranquila si tu presencia me fastidia? - pregunté
irritada.
Él
sonrió y me besó la mejilla. Me guiñó un ojo y se sentó a mi
lado. ¡Dios! Odiaba cuando hacía eso.
-Ven
allí con nosotros, prometo que ni te molestaré y/o intimidaré. -
dijo con la mano en alto. Reí pero irónicamente.
-Sólo
iré por Louis, me cae mejor que tú.- articulé haciéndole sentir
algo de celos. Él tensó la mandíbula en cuanto bajé del taburete.
Bien hecho Emma, objetivo alcanzado.
Me
senté con los chicos entre Louis y Niall. Al parecer este último
parecía bastante entretenido con su aparatito.
Narra
Niall.
No
cambiaría mi fondo de pantalla por nada del mundo, era tan adorable.
Pensé en su actitud la vez que vimos aquella noticia, pareció estar
rara. Pero tendría su motivo, si no lo quería contar, era su
decisión y yo la respetaba.
Niall
20:30
'Estamos
aquí con tus amigas, ¿no vienes? Xx'
Necesitaba saber cómo se
encontraba. Esbocé una sonrisa al ver que no había tardado en
responderme.
Maggie
20:31
'No
estoy muy bien... Gracias por hacerme saber que Emma está ahí. Xx'
¿No se encontraba bien? Iría a
ver como estaba.
-Chicos,- interrumpí la pequeña
discusión que mantenían Emma y Harold. ¡Vaya dos! Se llevaban como
el perro y el gato.- iré a dar 'otro paseo'.
Reí mirando a Louis.
-Va a ver a Maggie.- rectificó
Liam.
Me puse rojo y sonreí. Salí
antes de que alguien me reprochara algo más y ajusté la gorra a mi
cabeza intentando no ser reconocido. Pedí un taxi y volví a aquel
piso. Sonreí y subí las escaleras.
Narra
Maggie.
Mentí sobre mi estado de ánimo,
no tenía ganas de ir a Nando's. Aunque me sentí mal por engañar a
Niall, seguro que estaría preocupado.
Si estuviera preocupado te
hubiera contestado al mensaje, atacó mi conciencia.
Cállate conciencia.
Me entré en el baño, ya me
había quitado la ropa y le había dado al grifo. Iba a meterme en la
bañera cuando sonó el maldito timbre. Suspiré frustrada y cogí la
primera toalla que pillé.
Apagué el grifo y salí
corriendo, literalmente. Abrí y me encontré a Niall.
-¿Cómo te encuentras? - dijo
adentrándose en mi piso, tocándome la frente, parecía preocupado.
Fastidiate conciencia.
-Niall... Eh, yo me siento bien.
No me apetecía ir a Nando's. - articulé ruborizándome por la
insignificante toalla que llevaba encima. Él suspiró aliviado.
-¿Por qué te fuiste antes tan
cabreada? - preguntó.
-Sabes que Styles sabe enojar. -
él asintió riendo. No muy convencido, nunca desvelaría la verdad.
-Y bien, ¿por tu casa siempre
vas así? - ¡La toalla! Me volví a ruborizar.
-Cállate, estúpido. Me iba a
dar un baño.- sonreí.
-Pues corre a dártelo.- suspiré
fastidiada, no me iba a dar órdenes en mi propia casa.
-Ahora no quiero.- bufé.
-Pues si no lo haces, me temo que
te meteré en esa bañera aunque acabemos los dos ahí dentro.- dijo
seguro de sí mismo. Otra vez más, la Maggie ruborizada volvió a
aparecer. Negué con resignación y él se levantó de mi sofá. Se
acercaba a mí como león a punto de aprisionar a su presa. Reí. Él
se abalanzó sobre mí y me cogió sobre su hombro.
-¡Horan! Te juro que como no me
bajes, acabaré asesinándote.- gritaba pataleando.
Me encanta enserio siguela jeje
ResponderEliminaroye que es eso de tanto misterio entre las chicas q quieres matarme
Gracias por leer nuestra historia, jeje. Muy pronto se descubrirá el "secreto". Perdón por tardar en hacer capítulos, tendremos más dentro de muy poco.
ResponderEliminar