domingo, 9 de febrero de 2014

¡HOLA!

Hola lectoras.

Me pasaba por aquí para volver a avisaros de que subiré a la página de wattpad todos los capítulos que hay aquí. Os recomiendo que os hagáis una cuenta, ya que es gratis y te avisan de cuando hay un capítulo nuevo de la historia que añadas a tu biblioteca.
Así podréis votar y seguir leyendo nuestra novela.
Ha habido bastantes cambios, las protagonistas son las mismas excepto Maggie. Maggie ha cambiado el nombre por el de Samantha o Sam. Y la novela no se llama "Start with forever", sino "You don't know who we are". Nos pareció adecuado el título por lo que va a ir transcurriendo en la historia.
Muchas gracias por vuestra opinión y por leernos. Agradecemos esto.

Un besazo y os dejo la página de la historia:
http://www.wattpad.com/30348035-you-don%27t-know-who-we-are

Nuestros users en wattpad --> Paula:  (Makemehappy_1D)
Andrea: (Itsonedirection_)

¡GRACIAS!

martes, 19 de noviembre de 2013

¡Atención!

Dado que apenas nos da tiempo subir capítulos, hemos decidido, Paula y yo, publicar nuestra historia en wattpad. Que es una página dónde se encuentran infinidad de historias para todos los gustos. Espero que no sea mucha molestia y podáis votar y comentar, ya que nos alegraría saber que tenemos lectoras.
Os dejo mi cuenta de wattpad para que podáis seguir con vuestra lectura.
http://www.wattpad.com/user/Itsonedirection_
¡Saludos!
Perdonen las molestias.

jueves, 20 de junio de 2013

Capitulo 12


Narra Louis.

Necesitaba tomar un poco el aire. Todavía me preguntaba por qué Maggie se puso de aquella manera por los estúpidos reproches de Harry.
-Chicos, - dije mientras me levantaba de mi asiento.- voy fuera, necesito dar un paseo.
Ellos asintieron y me dirigí a la barra para saludar a Amy.
-Allí tienes al moreno.- le guiñé un ojo, ella sabía a quién me refería perfectamente, Zayn. Se ruborizó y sonrió tímidamente para ir donde se encontraban los demás.
Salí de aquel bar adentrándome en un pequeño bosque, era precioso, un sitio donde no había a penas gente, donde estar tranquilo. Pero a lo lejos distinguí una sombra. Poco a poco me fui acercando a aquella pequeña silueta, sus dedos enlazados entre sí sujetaban su mentón y lágrimas saladas brotaban de sus oscuros ojos.

-¿Emma?- me atreví a interrumpirle. Ella se sobresaltó y posó su mirada en la mía. Carraspeó e intentó disimular su recorrido de lágrimas.

-Louis, ¿qué haces aquí? -musitó.

-Decidí dar un paseo.- me senté a su lado.- Y ¿tú que narices haces aquí?
Ella vaciló por un momento, frunció el ceño y sonrió fingidamente.

-Siempre vengo.- no sonó muy convincente, pero asentí.

-¿Por qué lloras? - ahora quién arrugaba la frente era yo.

-¿Llorar? ¿Qué? ¿Quién? - reí por su incredulidad. - Está bien... Vengo aquí para alejarme de todo, y a veces necesito desahogarme, llorar es lo único que se me da bien hacer.
Noté ira en sus palabras, parecía que se odiase a ella misma.

-Tú no debes llorar, no lo mereces.- puse mi pulgar en su firme mentón y le sonreí.- Y ten por seguro que algo se te dará bien. Por ejemplo, rechazar al mismísimo macho alfa Styles.
Reímos. Le acaricié la mejilla, tuve que hacerlo. A nadie se le ve bien llorando.

Narra Emma.

Pensé mucho sobre si decirle la verdad, pero jamás se la diría. Por encima de mi cadáver. Louis me caía bien, era extrovertido y amigable, no era creído, más bien ninguno lo era, excepto el idiota de Styles. ¡Cómo lo odio! Mi subconsciente estaba hecho trizas y echando humo en cuanto pensé en él. ¿Por qué tenía que ocupar siempre la mayor parte de mis pensamientos? Lo odio. Lo odio. Lo odio.
-¿Emma estás bien? - decía Louis mientras pasaba una y otra vez su mano sobre mi rostro. Reí y asentí.

-¿Te apetece ir a Nando's? - preguntó esperando un sí rotundo.

-De acuerdo, si no hay más remedio.- suspiré, después de todo, llevaba todo el día en aquel lugar y medité lo suficiente. Nos levantamos de la húmeda hierba.

-Hmm, Emma...- carraspeó Louis.- ¿Sabes lo que le pasó a Maggie?
¿Maggie? Mierda, estaría buscándome por ahí como loca.
-De seguro que me estaría buscando.- dije segura de mí misma.
-Oh, no. No mostraba preocupación, ella no estaba preocupada, estaba molesta, se quedó en nuestra casa con Niall. - reí y ya sabría como atacar a preguntas a mi querida amiguita.- Echaron las noticias sobre un chico condenado a cadena perpetua por matar a una familia, al parecer ella se puso de la parte del chico y Harry acabó discutiendo con ella. Pero nada del otro mundo, solo que me pareció frustrante su actuación.

¡Mierda, mierda, mierda! Kevin, seguro. ¿Por qué Maggie? Como hayas dicho algo te asesinaré. Apretaba los puños con fuerza, pero me calmé al instante, nunca diría nada. Se tarda en ganar confianza con ella.
Sonreí.

-Seguro que no es nada, no es difícil discutir con Styles.- él asintió y entramos al local.
Saludé a los chicos sacudiendo la mano. Salvo a Harry, quien coqueteaba con unas estúpidas barbies que se pararon a hablar con él y de seguro a pedirle su teléfono o cualquier garabato que simulara un autógrafo.
¿EMMA? ¡Qué haces con tu vida! ¿Celosa? Por Dios, cálmate. Mi subconsciente me miraba sobre sus gafas de media luna con hipocresía. Sacudí mi cabeza y caminé hacia Amy, se le veía muy feliz, de seguro que ella y Zayn tenían algo, ese par no me engañarían tan fácilmente.

-¡Rubia! - la llamé feliz.

-¡Emma! ¿Tú por aquí? ¿Hoy? ¿17 de Marzo? Es para ver y no creer.- añadió con énfasis mi amiga. La miré asesina y reímos.

-Ya me molí los sesos suficiente, me pareció bastante este año.- sonreí.
Ella me devolvió la sonrisa.

-Ahora dime,- carraspeé.- ¿qué narices hay entre tú y Zayn?
Se ruborizó levemente.

-Nada, somos amigos.

-¿Nada? - abrí mis ojos.- Échale el diente, gatita. Se os nota a leguas que os gustáis. Y yo no he dicho nada, lo ha dicho un pajarito.

Reímos a carcajada limpia, era increíble que mi estado de ánimo dependiera de ella. Amy y Maggie eran las únicas amigas que tuve para confiar.
Se marchó para seguir atendiendo a los clientes.
El chico de rulos se acercaba a mí a paso lento, suspiré exageradamente. Al parecer se aburrió de las peliteñidas.

-Tranquila.- su voz habló.

-¿Cómo quieres que esté tranquila si tu presencia me fastidia? - pregunté irritada.
Él sonrió y me besó la mejilla. Me guiñó un ojo y se sentó a mi lado. ¡Dios! Odiaba cuando hacía eso.

-Ven allí con nosotros, prometo que ni te molestaré y/o intimidaré. - dijo con la mano en alto. Reí pero irónicamente.

-Sólo iré por Louis, me cae mejor que tú.- articulé haciéndole sentir algo de celos. Él tensó la mandíbula en cuanto bajé del taburete. Bien hecho Emma, objetivo alcanzado.
Me senté con los chicos entre Louis y Niall. Al parecer este último parecía bastante entretenido con su aparatito.

Narra Niall.

No cambiaría mi fondo de pantalla por nada del mundo, era tan adorable. Pensé en su actitud la vez que vimos aquella noticia, pareció estar rara. Pero tendría su motivo, si no lo quería contar, era su decisión y yo la respetaba.

Niall 20:30
'Estamos aquí con tus amigas, ¿no vienes? Xx'

Necesitaba saber cómo se encontraba. Esbocé una sonrisa al ver que no había tardado en responderme.

Maggie 20:31
'No estoy muy bien... Gracias por hacerme saber que Emma está ahí. Xx'

¿No se encontraba bien? Iría a ver como estaba.
-Chicos,- interrumpí la pequeña discusión que mantenían Emma y Harold. ¡Vaya dos! Se llevaban como el perro y el gato.- iré a dar 'otro paseo'.
Reí mirando a Louis.

-Va a ver a Maggie.- rectificó Liam.
Me puse rojo y sonreí. Salí antes de que alguien me reprochara algo más y ajusté la gorra a mi cabeza intentando no ser reconocido. Pedí un taxi y volví a aquel piso. Sonreí y subí las escaleras.

Narra Maggie.

Mentí sobre mi estado de ánimo, no tenía ganas de ir a Nando's. Aunque me sentí mal por engañar a Niall, seguro que estaría preocupado.
Si estuviera preocupado te hubiera contestado al mensaje, atacó mi conciencia.
Cállate conciencia.
Me entré en el baño, ya me había quitado la ropa y le había dado al grifo. Iba a meterme en la bañera cuando sonó el maldito timbre. Suspiré frustrada y cogí la primera toalla que pillé.
Apagué el grifo y salí corriendo, literalmente. Abrí y me encontré a Niall.

-¿Cómo te encuentras? - dijo adentrándose en mi piso, tocándome la frente, parecía preocupado.
Fastidiate conciencia.

-Niall... Eh, yo me siento bien. No me apetecía ir a Nando's. - articulé ruborizándome por la insignificante toalla que llevaba encima. Él suspiró aliviado.

-¿Por qué te fuiste antes tan cabreada? - preguntó.

-Sabes que Styles sabe enojar. - él asintió riendo. No muy convencido, nunca desvelaría la verdad.

-Y bien, ¿por tu casa siempre vas así? - ¡La toalla! Me volví a ruborizar.

-Cállate, estúpido. Me iba a dar un baño.- sonreí.

-Pues corre a dártelo.- suspiré fastidiada, no me iba a dar órdenes en mi propia casa.

-Ahora no quiero.- bufé.

-Pues si no lo haces, me temo que te meteré en esa bañera aunque acabemos los dos ahí dentro.- dijo seguro de sí mismo. Otra vez más, la Maggie ruborizada volvió a aparecer. Negué con resignación y él se levantó de mi sofá. Se acercaba a mí como león a punto de aprisionar a su presa. Reí. Él se abalanzó sobre mí y me cogió sobre su hombro.

-¡Horan! Te juro que como no me bajes, acabaré asesinándote.- gritaba pataleando.

martes, 11 de junio de 2013

Capítulo 11

Narra Amy

Llegué temprano al trabajo, solo había llegado James, que acababa de abrir el café.
-¿Aún no ha llegado Sarah?- le pregunté.
-No. Vendrá en unos minutos. Si necesitas algo estoy en mi despacho- y tras estas palabras se oyó la puerta cerrarse.
Me fui a la trastienda, donde me cambié, poniéndome solo un mantel negro que cubría desde mis caderas hasta unos centímetros encima de la rodilla.
Al salir, Sarah entraba por la puerta sofocada.
-¿Estás bien?- le pregunté mientras ella se doblaba, descansando sus manos en las rodillas.
-Sí, es que llegaba tarde.
Parecía una escusa más que la razón de ese estado de alarma. Como si le fuesen a disparar en cualquier momento. Serán paranoias mías.
Cuando las dos estuvimos listas, empezaron a entrar los primeros clientes. Entre las dos buscábamos la llave de la caja registradora pero no la encontrábamos.
-Voy a preguntarle a James
-Sí, mejor. Yo seguiré buscando por aquí- me respondió mientras yo me dirigía a su despacho.
Moví el pomo de la puerta sin ni siquiera llamar.
-Muy bien hecho- oí la voz de James.
-Lo siento, no sabía que estabas ocupado- y tras estas palabras volví a cerrar la puerta y me fui donde estaba Sarah.
-¿Qué te ha dicho?- me preguntó Sarah.
-Estaba hablando por teléfono.
-Pues no sé donde puede estar.
Entonces me acordé.
-Qué cabeza tengo- me dije a mi misma- La entré en el mantel para que no se perdiera- saqué la llave y se la entregué.
-Anda que ya te vale- dijo mientras se alejaba para atender a algunos clientes.
¡Qué bien me caía esta chica!

Narra Sarah

Me alejé de Amy para seguir con mi trabajo. Pensé que me descubriría cuando se preocupó por mi estado al llegar. Mi nerviosismo se alteró rápidamente, espero que no lo hubiera notado. Ahora he de acercarme mucho más a ellas, y dercionarme de que no corren riesgo alguno.

Narra Maggie

Desayunaba tranquila con los chicos entre risas y bromas y dejando apartada las noticias que en este momento iluminaban la televisión. Pero en un instante dirigí la vista hacia esta, justo cuando volvían a retransmitir la noticia que hace poco nos alertó a todas.
-Hace unos días, la policía detuvo a un antiguo integrante de las mafias. Se le acusa, a él y a sus compañeros que aún siguen fugitivos, de la muerte de nueve personas, todas de las familias Dankworth y Birdwistle, las cuales trabajaban para ella hasta hace una década. Se han encontrado todos los cuerpos de los familiares, excepto los cuerpos de Juliet y Noah, las hijas de la familia Birdwistle y la hija menor de la familia Dankworth, Leah. Esta mañana fue juzgado por el juez Castro y se le ha condenado a cadena perpetua.
Al parecer mi rostro alertó a los demás, puesto que las risas pararon y todos los ojos de aquella sala se fijaron en donde mi mirada estaba puesta.
-¿Como puede haber gente que haga eso?- preguntó Harry deshaciendo el silencio que reinaba en la estancia.-¿Hay gente que no tiene cabeza?¿Como pueden matar a una familia entera así sin más? Se merece la cadena perpetua que le ha caído- escupió esas palabras con algo de amargor.
-No todos se merecen eso- un hilo de voz salió de mi garganta. Esas palabras me habían hecho daño, puede que Kevin fuera de ellos pero siempre nos ayudó de corazón, hasta se plantó dejarlo y seguir con nosotras.
-¿Cómo que no?-Harry parecía alterarse demasiado-¿No hubieras querido lo mismo para él si hubiera sido tu familia a la que hubiera asesinado? Pues a mi sí.
-Tal vez ellos se lo buscaron-el odio corría por mis venas hasta ser reflejado en esas palabras.
¡Maggie, callaté!¿Qué se supone que estás haciendo? Vas a rebelarte.
-¿Cómo?- preguntaron todos casi al unísono.
Mi nerviosismo se hacía notable y no tenía excusa alguna que decir.
-Bu..bue...bueno, yo no sé, tal vez,- las palabras no salían de mi boca- ellos... ehh..
Evité el contacto con sus miradas, mientras todos esperaban mi respuesta. Miré el reloj.
-Las once- exclamé- Chicos he de irme.
Y sin dejar que me reprocharan nada, cogí mis cosas y salí de aquella casa para dirigirme a la mía.

Narra Zayn

Todos nos quedamos extrañados cuando se fue Maggie.
-Yo creo que no ha sido para ponerse así- rompió el silencio Harry.
-¿Porqué se puso tan nerviosa?Solo fue una noticia- repuso Liam.
-No sé- respondí mientras nos encaminábamos todos al salón.
-¿Vamos a dar una vuelta?-dijo Niall.
-¿A donde?- preguntó Louis.
-¿Porqué no vamos a Nando's?- propuse.
-¿Y eso? El que normalmente quiere ir es Niall no tú- dijo Liam.
-No sé, me apetece dar una vuelta y ver algo por ahí.
-O a alguien- repuso Louis moviendo las cejas.
-¿Qué?¡No!- respondí-¿Qué insinúas?
-Que probablemente quieras ir para ver a una chica de pelo rubio y ojos verdes- respondió Harry.
-¿Qué dices?¿A Amy?
-Si, el otro día en la fiesta se os veía muy pegaditos- dijo Louis.
La verdad es que ese noche fue una de las mejores. Nunca me había sentido tan bien al lado de una chica, por no decir lo guapa que era. ¿Y esa escena de celos?¿Me empezaría a gustar esa chica?
-¡Mirar si está más rojo que un tomate!- exclamó Niall.
No lo había notado, pero en esos pensamientos la sangre había subido hasta mis mejillas tornándolas en rojo.
-¡Anda, callaos ya!- gire la cara para tapar en lo posible mi rostro.
Después de aquella discusión, decidimos ir hacia allí.
No tardamos más de quince minutos en llegar, nuestro chofer nos había traído y dejado en la puerta. Y camuflados para que la gente no nos reconociera, entramos en Nando's. Estaba limpiando algunas mesas, mientras tarareaba bajito. Una sonrisa estampó mi cara al verla. Sonriente, despreocupada. Y no pude dejar de mirarla ni por un segundo.

Narra Emma

Seguía con la mirada perdida y mis manos arrancando la hierba bajo mis pies. Todo mi mundo se detuvo. Estaba sola en aquel bosque, tan solo acompañada por el canto de los pájaros y el silbido del viento al pasar entre las hojas. Los recuerdos agolpaban mi mente, rememorando momentos felices, alguna que otra riña que siempre se solucionaba. Los echaba tanto de menos, que si pudiera volver el tiempo atrás, lo pararía para volver a estar con ellos aunque solo fuera un día más. Mil lágrimas querían salir de mi ojos y la tristeza me invadía por completo. Las horas pasaban lentas admirando aquel paisaje que detallaba la naturaleza.
Me recosté en la hierba boca arriba, cerré los ojos con fuerza queriendo volver a cualquier día en los que estaba con ellos.
Flashback
Era un día en el que el sol había salido, después de tantos días escondido entre las nubes.
-Leah- llamaba una mujer a su hija desde el piso de arriba.
-Ya voy mamá.
La chica cogió su bolso y se miró por ultima vez al espejo.
Al bajar, sus hermanos jugaban entretenidos a la videoconsola y su madre la esperaba en la entrada para salir las dos juntas.
-¿Y papá?- le preguntó a los chicos.
Ellos la ignoraron, por lo que ella se acercó a ellos y arrancó de golpe el cable de la televisión, por lo que ambos chicos dirigieron sus miradas hacia ella.
-¿Qué haces?- respondió uno de ellos.
-¿Donde está papá?- volvió a preguntar.
-En el despacho- contestó el otro- Ahora vuelve a enchufar en cable que queremos seguir jugando.
La chica se apenó al oír esas palabras.
-¿No venís?- preguntó esperanzada.
-Claro, renacuaja. No pensarás que nos vamos a perder el maravilloso baile que vas a hacer. Pero iremos cuando actúes.
-Vale- una sonrisa brotó en su cara, aunque seguía triste al saber que su padre, seguramente, no se molestaría en presentarse al estudio de ballet.

-Emma, ¿eres tú?- y esas palabras pararon mis pensamientos.

martes, 21 de mayo de 2013

Capítulo 10


Narra Amy

Apagué el despertador que sonaba en mi mesilla. Me desperecé y recordé el día en el que estaba. 17 de marzo. Hoy iba ser un día triste para Emma.
Me levanté y me dirigía a su habitación ¡No estaba! Eran las ocho y media. Supongo que ya se habría ido a comerse la cabeza. Este día no daría señales de vida.
Fui hacia la habitación de Maggie. No la encontré y su cama estaba hecha. Entonces recordé que por la noche solo regresamos Emma y yo. ¿Pero si iba a venir con Niall en un taxi? ¿Donde estará? Genial yo sola en casa y preocupadas por las dos. Decidí enviarle un whatsapp.

Amy. 08:33
¿Donde estás? Estoy muy preocupada por las dos. Cuando vuelvas a casa ya sabes donde está la llave, me voy a trabajar. X”

Después de enviarle el mensaje, me di una ducha de cinco minutos y me vestí simple.




Cerré la puerta y me dirigí fuera de casa con una sonrisa, sin saber el mal presagio que se avecinaba sobre nosotras tres.

Narra Niall

Los rayos de luz se filtraban por la rendija de la ventana. Me froté los ojos e intenté moverme, pero un cuerpo sobre el mío me lo impedía. Estaba tumbada en mi pecho. Le aparté el pelo de la cara para admirar su hermoso rostro. Una sonrisa imborrable se dibujó en mi cara. Se la veía serena y dulce. Sus labios rosados entreabiertos emitía pequeños gemidos mientras se aferraba a mi torso intentando retener mi cuerpo pegado al suyo.
Un móvil sonó. Abrió los ojos lentamente mientras intentaba ubicarse.
-Buenos días.- dije sonriendo.
-Niall, ¿qué haces aquí?¿qué hacemos los dos juntos en la misma cama? ¡Ay, por dios! No me digas que tú y yo...- dijo alterándose un poco.
-Tranquila,- le espeté- ¿de verdad no te acuerdas de lo que paso anoche?- ella negó frustrada- Estabas demasiado borracha, por lo que te traje a casa y me pediste que durmiera contigo cuando yo me iba hacia el sofá- poco a poco se iba sonrojando- Por cierto, tu móvil ha sonado.

Narra Maggie

¡Qué vergüenza! Había dormido con él, me había despertado apoyada en su pecho.
Intenté distraerme mirando el whatsapp que me había enviado Amy. Me senté en la cama y dirigí mi vista al móvil.

Amy. 08:33
¿Donde estás? Estoy muy preocupada por las dos. Cuando vuelvas a casa ya sabes donde está la llave, me voy a trabajar. X”

¿Las dos? ¡Emma! Rápidamente me acordé del día que era. 17 de marzo.
-¡Mierda! ¿Pero cómo puedo ser tan estúpida?- dije en alto sin acordarme de que Niall seguía detrás de mí-¡Joder, joder, joder!
-Maggie,¿pasa algo?-mis ojos se agrandaron y me dí media vuelta. Niall lo había oído ¿Qué le decía yo ahora?
-Eh.. No, nada. He de irme.- Corrí a vestirme. Solo llevaba puesta una sudadera suya.
-¿Estás segura?- preguntó indeciso. Seguramente sabía que estaba mintiendo. Pero, ¿qué le iba a decir?¿La verdad? Jamás.
-S..Sí.-Ya estaba vestida y lista para irme.
-Por lo menos quédate a desayunar conmigo y con los chicos ¿no?- me preguntó con una sonrisa. Ay... que sonrisa. Maggie pero, ¿qué estás pensando?-Por favor..-me suplicó.
-Bueno si insistes- A Emma no la encontraría hoy, todos los años pasaba lo mismo. No perdía nada.- Pero le voy a enviar un mensaje a Amy, que está preocupada por mí.
-Vale, te espero abajo.- me dio un beso en la mejilla y salió de la habitación.
Inconscientemente me lleve la mano a la mejilla y sonreí como una idiota.

Maggie. 09:17
Estoy en casa de los chicos. X”

Bajé las escaleras y me los encontré a todos desayunando tranquilamente mientras veían las noticias.
-Buenos días- saludé.
-¿Qué haces aquí?- preguntó Zayn y dirigiendo rápidamente la mirada hacia el rubio.
-¿Has dormido aquí?- preguntó Liam.
-Y mucho y más importante ¿qué habéis hecho Nialler y tú en esa habitación esta noche?- preguntó Louis insinuando mientras levantaba las cejas seguidamente.
-Nada.- respondió Niall antes que yo- Simplemente, ayer estaba algo contenta y me la traje a casa a que durmiera.- dijo indiferente.
Algo de mí dentro se removió. ¿No hubiera querido que pasase nada?¿Solo estaba allí porque le había dado pena? Eso me dolió. Creo que estoy sintiendo algo más fuerte por ti, Niall. Aunque eso que yo pienso nunca se cumplirá. Todo por mi pasado.

Narra Emma

No había dormido nada esta noche. Hoy era un día oscuro y gris, sin color, para mí.
Salí de casa sobre las siete de la mañana. Ande durante un largo rato, pero no sé cuanto tiempo. Solo sé que mis pasos me guiaron a las puertas de un bosque. Parecía tranquilo, todo silencio. Perfecto para meditar. Entré y a los pocos pasos me encontré una laguna cristalina, de aguas clara. Se respiraba paz y tranquilidad. Me tumbé en la fresca hierba abrazándome a mis rodillas. Todos los años lo recordaba, y este no iba ser distinto.

Narra X
Seguí a la chica sin que ella se percatara de mi presencia. Se internó en un pequeño bosque. Este sería el lugar perfecto. Debía averiguar la verdad. Todo debía ser mio y estas dos chicas tenían las respuestas a todos mis problemas.
Le hice unas cuantas fotos, cuando jugaba con la hierba, intentando sacar alguna que sirviera para averiguar quién era. Tras unas cuantas más, me di por satisfecho, por lo que salí de aquel bosque dejando a la chica con sus pensamientos y marqué su número.
-¿Si?- preguntaron desde la otra línea.
-Jefe, ya tengo las fotos.
-Muy bien hecho.- me agradeció cuando una voz se escuchó de fondo.
-Lo siento, no sabía que estabas ocupado.- y tras estas palabras la puerta volvió a estar cerrada.
-¿La espía?- pregunté.
-La espía.

jueves, 9 de mayo de 2013

Capítulo 9.


Narra Amy.

Después de contarle a las chicas lo de la fiesta. Decidimos empezar a prepararnos. Ahora que lo pensaba ¿sabíamos a que hora abría la discoteca?
-Oye, ¿alguna de vosotras tiene el número de los chicos?
-Si yo- dijo Maggie saliendo del cuarto de baño con dos toallas, una enrollada a su cuerpo y la otra en su cabeza.- El de Niall.
Por un momento, no me extrañé que tuviese su número. En fin, habían estado tonteando desde que se conocieron.
-Bien pues mándale un whatsapp para saber a que hora hay que estar en la puerta de la discoteca. - y tras decir esto me metí en mi habitación a elegir la ropa mientras esperaba a que Emma saliese de la ducha.

Narra Maggie

Después de que Amy se encerrara en su habitación, le envié el whatapp a Niall como esta me había dicho.

Maggie. 21:20
Oye ¿a qué hora debemos estar en la puerta de la disco? X”

Mientras esperaba la contestación me metí en mi habitación para seguir preparándome, pero solo me dio tiempo a secarme un poco el pelo con la toalla cuando me sonó el móvil.

Niall. 21:22
¿Qué os parece a las once y media? Espero que hoy no se me caiga ningún vaso encima tuya. X”

Abrí el mensaje y sonreí como una tonta.

Maggie. 21:23
Perfecto allí estaremos. Yo también lo espero. X”
Tras contestar me puse la ropa interior y abrí mi armario para decidir que me iba a poner. Poco tiempo después ya lo tenía decidido.

Narra Emma

¿Porqué tenía que ser así? Era un completo gilipollas. Pero...¿por qué ocupaba mi cabeza todo el día? Era un creído y un mujeriego. Supongo, que porque no lo aguanto.
Poco después de ducharme entró Amy diciéndome que siempre tardaba mucho.
Fui hacia la habitación y me vestí y maquillé. Al entrar al salón ya estaban las dos esperándome. No sé como lo hacía que siempre era la última, aunque me empezase a preparar de las primeras.
{Emma} {Amy} {Maggie}












Estaban guapísimas.
-Creo que alguien va a ligar esta noche.- dijo Maggie tras fijarse en nuestros vestidos.
-Habló quien ya ligó.- rechistó Amy que recibió un leve codazo de Maggie. Reímos.
-¿Bueno nos ponemos en camino?
-Sí, son las once y cuarto seguramente llegaremos tarde- asintió Amy.

Narra Niall

Estaba muy nervioso. Me encantaba estar con ella, nos reíamos de las mismas cosas, nos llevábamos muy bien.

-¿Bailamos? - me susurró en mi oído. La verdad es que estaba algo ebria, me hacía reír.
-De acuerdo.- dije animado. Fuimos a la pista de baile, al principio sonaba una canción con mucho ritmo, pero luego la cambiaron por otra extremadamente lenta. Los dos nos fijamos en todas las parejas y echamos a reír. Pensaba que ella se iba a volver a la barra, me equivocaba, ella me cogió de la mano y la colocó en su cintura. Puso sus manos alrededor de mi cuello y apoyó su cabeza en mi pecho, dejándome obtener más contacto de ella. Miré hacia atrás para ver la expresión de los chicos que nos miraban asombrados, yo les sonreí.

Narra Harry.

Niall no perdía el tiempo, desde luego que no.
Aparté la vista de ellos y me fijé en Emma que reía con un chico que acababa de conocer por algo que ignoraba, pretendía hacer que captara mi atención.
-Esta noche te ves hermosa.-susurré pegándome en su cuello.
Ella no dijo nada, me apartó la cabeza con su mano y resopló al ver que aquel chico se iba por mi culpa. Seguía sin hacerme caso.
-No me ignores.- dije sujetándole el rostro con mis manos. Ella cogió mis manos y las apartó sin más. Me rendí y le llevé a la pista agarrándole las manos para que no se librara.
-¿Qué haces? Eres idiota.
-No soy idiota, intento llevarte a bailar.
Revoleó los ojos y le coloqué mis manos en su cintura rudamente para que no pudiera irse.
-Me haces daño, bruto. No voy a salir corriendo.
Sonreí aflojándole el agarre. La arrimé más a mi provocándole un pequeño gemido, me reí. Hundí mi cabeza en su cuello.
-Harry – advirtió.- No vuelvas a hacer eso.
-Admiraba mi marca, te queda realmente bien.
-¿Por qué no elijes a otra chica y la sacas a bailar? ¿por qué yo? - preguntó indignada.
-Porque eres mía.- dije tocándole la marca. Resopló y se escaqueó de mi agarre.
Al menos no me había dado un bofetón como la última vez, sonreí.

Narra Zayn.
Ya era bastante tarde, toda la noche la pasé al lado de Amy. Se veía muy bien en ese vestido. Bailé con ella, me dirigí a la barra para ir a por nuestros respectivos vasos.
Me di la vuelta y me quedé mirándola, estaba bailando con otro chico, no sabía quien era, hasta que fui allí.
-¿Este es? - dije fulminándole con la mirada.
-Es James, mi jefe. - ella seguía bailando con él. Le cogí de su muñeca y la apoyé contra mi.
-Lo siento, James. Yo ya estaba bailando con ella.- Reprimí una risita y nos fuimos a la barra.
-Eres un celoso, Zayn. - puso un puchero Amy.
-No lo soy, prefiero que estés conmigo que con él.- ella sonrió y me besó en la mejilla. Sentí millones de sensaciones en ese instante, me sentí estúpido y torpe.
Ya era tarde, por lo que decidimos irnos de aquel antro. Llevé a Amy y a su amiga Emma a su apartamento, con los demás chicos menos su otra amiga Maggie y Niall, que dijeron que pedirían un taxi después.

Narra Maggie.
Tenía un terrible dolor de cabeza y me reía de todo.
-Niall, quiero irme a casa.- asintió y pidió un taxi. Pero no era a mi dirección, ¿a dónde me llevaba? No me importaba, me apoyé en su hombro y cerré los ojos.
*
*
*
-Maggie, despierta, no te quedes en este coche a dormir.- dijo su agradable voz.
Con los tacones en una mano y otra alrededor de su cuello, salí del taxi y caminé por aquel césped húmedo. Froté mis ojos, y resoplé al recordar que iba maquillada.
-¿Qué es esto?
-Es mi casa, están los chicos dentro, pero estarán en sus habitaciones.
-¿Por qué me has traído aquí? - pregunté frustrada.
-¿Te has visto cómo estás? Ahora mismo si te suelto, eres capaz de caerte.- reímos.
Abrió la puerta de aquella fantástica casa y subimos a su habitación, dónde tenía su propio baño.
-Date una ducha, lo necesitas.- asentí. Al cabo de poco ya tenía una toalla alrededor de mi cuerpo y salía del baño como si estuviera en mi casa.
-Ma-Maggie, tienes una sudadera mía encima de la cama.- me dijo dándose la vuelta para no verme con esa toalla.
-No hace falta que te des la vuelta, ya habrás visto esto antes, y en mejores cuerpos.-reí. Pero él se seguía sin dar la vuelta, me puse su sudadera.
-Que sea famoso, no quiere decir que haya tenido que ver eso antes.- dijo, a secas.
-No te enfades, tonto.- dije girándole para que me viera y dándole un beso en la mejilla.-Me lo he pasado muy bien esta noche, pero me gustaría dormir.
-Duerme en mi cama, yo dormiré en el sofá.
-No, tranquilo, puedes dormir aquí, confío en tu palabra.- reímos.
Al cabo de poco nos quedamos profundamente dormidos.

martes, 30 de abril de 2013

Capítulo 8.


Narra Maggie.

Me levanté después de oír gruñidos en el salón.
-¿Emma? - dije mientras frotaba mis ojos.
-Sí, soy yo. - contestó con su mano sobre el cuello.
Me pareció sospechoso pero lo dejé pasar, decidí hacer unas tostadas para las dos.
-¿Qué pasó anoche? - decidí romper el molesto silencio, metiendo las tostadas en el tostador.
-Hm... Si te lo cuento, ¿prometes no gritar? - dijo apenas audible tras yo asentir varias veces seguidas. -Pues ayer... Harry...
-Oh no. - dije con mi mano en la boca mientras ella me enseñaba la terrible marca morada que supuestamente, le había hecho Harry.
No pude reprimir una risita.
-No te rías mala persona.- mi risa era contagiosa, por lo que acabamos riendo las dos.
Arrugué la nariz debido al asqueroso olor a quemado que salía del tostador.
-Madre mía, esto me pasa por escuchar tus historietas, Emma.- dije riendo.
-A mi no me eches el marrón.- refunfuñó.
-Pues esas tostadas eran las únicas que quedaban, y no hay más magdalenas, seguro que se las comió Amy.- dije inspeccionando la bolsa de magdalenas que estaba en la repisa.
-Me temo que tendremos que salir a desayunar a algún sitio no muy caro.- dijo Emma soltando una pequeña risa.
-Tenemos que subir a cambiarnos, te doy media hora, no tardes. - dije como si de un teniente se tratase.
-Señor, sí señor.- dijo Emma divertida.

Narra Emma.
Subí a mi habitación, al igual que Maggie.
Por muy mal que yo estuviera, ella hacía todo lo posible por hacerme sonreír.
Escogí mi conjunto y peiné mi cabello en una coleta. Salí al salón donde también estaba Maggie con su ropa y su pelo suelto.
Íbamos así, ya que hacía buen tiempo.
Emma {Azul}. Maggie {Rosa}.
-Maggie, eres una presumida, te vas a congelar.- dije mirándole.
-Para presumir, hay que sufrir.- dijo con esa risa suya mientras cogía su billetera.
Salimos hacia el bar donde trabajaba Amy, ya que no teníamos idea de otro.

Narra Zayn.
Hablábamos y hablábamos de Niall y sobre la foto de su móvil.
-¿Se lo dirás?- preguntó Louis alzando las cejas.
Nialler se encogía de hombros mientras nos fulminaba con la mirada, pero esa mirada se volvió tierna cuando apartó la vista de nosotros y se centró en la puerta de entrada.
-Mira quienes son.- dijo Harry con una sonrisa pícara en su rostro.
Giramos nuestra vista y era Maggie acompañada de Emma.
Se dirigían a la barra donde estaba su amiga rubia, Amy. Era tan... ¿Zayn? ¿En qué piensas? Sacudí mi cabeza y me centré en la discusión, no muy fuerte que mantenían Harry y Nialler.
-Ni se te ocurra llamarles.
-Lo haré. Creerme.- finalizó la discusión Harry.
Tras esas palabras Harry se levantó del sitio.

Narra Amy.
Harry se dirigía hacia aquí.
-Chicas, ¿os apetece salir de fiesta esta noche?- comenté.
-¡Sí! - gritó Maggie pegando un pequeño salto de alegría. Reímos.
-Si no hay más remedio...- dijo menos animada Emma.
-Claro que irás.- susurró Harry pegado en su cuello.
-¿Qué se supone que haces?- gritó Emma enfadada y apartándose de Harry.
-Déjale Harry.- dije colocándome en medio de Harry y Emma.
El chico de cabello rizado me cogió de la muñeca para que me apartase, pero no lo consiguió.
-Suéltale.- dijo una voz que yo ya había escuchado.
Harry me soltó y fue a su asiento, dejando ver a un Zayn preocupado.
-¿Estás bien?- me preguntó con esos ojos oscuros hipnotizadores.
-No te preocupes, pronto se me pasará.- dije apenas audible.

Narra Harry.
No quería hacerle daño. A veces pienso que cómo puedo ser así de gilipollas.
Me volví a levantar de mi sitio y decidí ir a pedirle perdón.
-Amy...- ella no apartaba la mirada del suelo, jugaba con sus dedos.-Lo siento, sé que a veces me puedo pasar por mi fuerza, no quería hacerte daño. Perdóname.
-N-No es nada.
-Lo siento.
Le abracé.
-Tranquilo, quedas perdonado, no me agobies Styles.- revoleé los ojos.
-Tienes suerte de que no se haya enfadado, te aseguro de que ella te puede montar una buena.- añadió Emma, que ni me miraba.- Por cierto, yo tenía que hablar contigo.
-De acuerdo...- ¿de qué querría hablar? Supongo que sobre lo de ayer, Se me formó una media sonrisa y la seguí hacia un lado del bar mientras los demás se sentaban en la mesa.
-Respecto a lo de ayer.- Bingo. Asentí para que continuara.- No quiero que pienses que soy una cualquiera a la que puedes manejar como y cuando te de la gana. No vas a conseguir nada conmigo, Styles.- me reí ante su última palabra. Pero después, su mano viajó fuertemente hacia mi rostro.
-Eso va por la marca.- me guiñó un ojo mientras volvía a la mesa. Me quería volver loco, sin duda.

Narra Niall.
Los demás hablaban de cosas que yo ignoraba, me dedicaba a mirarle.
-Hoy, Nialler,- me centré en escuchar la conversación que mantenía Louis.- ni se inmutaba del olor a tostadas.
-Y eso ¿por qué? - dijo Maggie riendo entre dientes.
-Gracias a su móvil.- soltó Louis, que se llevó un codazo de mi parte.- Quizás te interese saber algo, Maggie.
Me quedé paralizado al oírle decir eso, como lo dijera lo lamentaría. Miré hacía Louis susurrándole 'Ni se te ocurra.', pero lo iba a hacer.
-A Nialler le gustaría que te hicieras una foto con él.- suspiré porque me temía lo peor.
Maggie se reía.
-¿No sería al revés? Un famoso, me pide una foto, que irónico.- dijo divertida.- ¿A qué esperas para sacar el móvil?
Saqué el móvil de mi bolsillo trasero, pulsando el botón de la cámara. Ella se colocó a mi lado, inspiré su perfume.
-¿Qué te parece si te hago esto? - cogió mis mofletes con su mano y los apretó.
Ella puso morritos en la foto, era adorable.
Cuando vimos la foto no parábamos de reír.

Narra Emma.
A Maggie se le veía muy feliz al lado de Niall. Y el payaso de Harry no paraba de mirarme con esa sonrisa postrada en su rostro.
Al cabo de poco decidimos irnos hacia el apartamento.
Sin quererlo, la tarde se nos pasó allí, hasta Amy acabó su turno.
-Antes, Zayn y los chicos me pidieron que fuéramos hoy con ellos a una fiesta.- añadió Amy mientras se tiraba boca abajo en el sofá.
-Me parece bien.- comentó Maggie que salió disparada a su habitación con el fin de darse un buen baño y prepararse.
Yo no sabía que contestar, pero no pensaba quedarme aquí encerrada, intentaría mantenerme lo más alejada de él posible.
-De acuerdo. - asentí finalmente y pusimos rumbo a nuestras habitaciones.