domingo, 14 de abril de 2013

Capitulo 6


Narra Maggie.

Para cuando quise abrir los ojos y separarme de él, todo el mundo nos miraba.
-Me temo que nos mira todo el mundo...- dije apenas audible, estaba bastante nerviosa y miraba hacia abajo jugando con mis dedos.
Me acercaba hacia la mesa donde estaban los demás y aunque nosotros fuéramos el centro de atención, Emma y Harry no se quedaban atrás. Tenían una buena formada.


Narra Emma.

El idiota de Harry no me dejaba en paz en un solo segundo. Estaba realmente enfadada, no me agradan ese tipo de chicos.
-¿Por qué mejor no coges tus cosas y me dejas en paz? - grité furiosa mientras él fruncía el ceño.-Será mejor que me vaya yo, ya que tú eres tan narcisista que no harías eso por nadie.
Me dirigía enfadada hacia la puerta y mis amigas me miraban frustradas. Deseaba irme de allí, ese chico me sacaba de mis casillas, pero mis deseos fracasaron, Harry me cogió de la muñeca levemente para que girara sobre mí misma y quedara totalmente pegada a él.
-¿Qué te crees que haces? - pregunté irritada.
-Disfrutar de este momento.- dijo aun pegado a mi, con esa sonrisa extraña. Conseguí escapar de él dejándole con la palabra en la boca. Al fin, salí de aquel bar y caminaba apresurada hacia mi apartamento. Pero unas manos rodearon mis costados y me giré para darle un buen puño en el estómago, cosa que no pensé dos veces y conseguí mi objetivo.
-Has hecho un buen gancho.- decía mientras una leve sonrisa se le formaba en la comisura de los labios.
-Ni aún dándote tu merecido escarmientas. ¿Me dejarás en paz?
-No, tan simple y sencillo como eso.
Yo solo revoleé los ojos y volví la vista hacia mi camino, aligerando el paso. Miré a la izquierda y todavía estaba a mi lado. Suspiré.
-No entiendo el por qué todas estas cosas me pasan a mí.- dije lo bastante alto como para que él se enterase.
-Yo tampoco entiendo el por qué huyes de mi.- dijo riendo entre dientes.
-Nada más hay que verte la cara, don Juan.- dije divertida.
-Así que ¿piensas que soy un don Juan? - puso su mano en el pecho e hizo uno de sus mejores pucheros. Revoleé los ojos y asentí.- Te equivocas, cariño.
Fruncí el ceño cuando me llamó por ese estúpido nombre. Él estiró su mano hacia mi mentón. Le quité la mano rápidamente, pero no funcionó de nada ya que me cogió mis dos manos con una sola mano suya.
-Dejame. No es tan difícil de comprender. P-Por favor...- esas últimas palabras las dije menos audibles, él se acercaba hacia mi cuello dejando un rastro de unos besos húmedos. Hacía fuerza para librarme de su agarre, pero su enorme mano me cubría las dos mías. Noté sus labios presionar en la piel de mi cuello mientras las puntas de sus rizos rozaban mi mejilla. Instantáneamente logré poner libre a unas de mis manos y posándolas en su pecho intentando hacer algo de distancia entre nosotros, cosa que no logré.
-Harry.- supliqué.
El dolor se intensificó cuando sus dientes rozaron la piel. Su risa entrecortada inundó la oscura calle apenas habitable en la que paramos mientras yo luchaba desesperadamente contra su retención pero no servía de nada, él seguía succionando la sangre hacia la superficie.
Harry se apartó con esa extraña sonrisa dejando mi última mano, al fin, libre. Mis dedos fueron rápidamente hacia mi cuello, aspirando una gran bocanada de aire cuando froté sobre la zona afectada.
-Ahora todos saben que eres mía.- dijo en voz baja.

Narra Amy.

Después de que Emma se fuera seguida de Harry, nos quedamos charlando un rato más con los chicos.
-¿Qué les pasa ha esos dos?- preguntó Maggie que acompañada de Niall se unía a la conversación.
-Parece que Harry ya ha encontrado a su próxima conquista- respondió Louis.
-¿Su próxima conquista?- preguntamos Maggie y yo al unísono.
-Emma caerá a sus pies, como han caído muchas otras- dijo Zayn.
-Emma no lo hará, ¿no habéis visto lo mal que se llevan?- dije.
-Por eso para Harry será un reto- dijo Liam.
Al poco rato, decidimos que era hora de marcharnos. Los chicos se dirigieron a su casa, y nosotras cuando íbamos a cruzar la puerta, alguien me coge del brazo, haciendo que me girara.
-Amy, recuerda que mañana a las 9 empieza tu turno.
-Claro, James, aquí estaré- respondí con una sonrisa en la cara.

Narra Sarah.

No me podía creer lo que estaba viendo, hacía muchísimo tiempo que no veía su cara, ni sabía nada de ella...
Cuando terminé de presentarme me fui hacia la barra para seguir con mi trabajo, mi mente no podía concentrarse bien en el trabajo, verla a ella sonreír hacia que todo hubiera valido la pena. Ella era feliz eso era lo que importaba, al fin y al cabo, era mi propósito. Había entablado una buena amistad, al parecer, con esas dos chicas que parecían preocuparse con ella. Emma, a ella la recordaba, siempre había sido muy buena chica, aunque después, se volvió algo desconfiada. Pero me parece normal después de todo lo que ha vivido. Y luego esta la otra chica, Amy, creo que se llamaba. A ella no la conozco, y eso puede peligrar su vida. He de hacer todo lo posible por acercarme a Maggie, he de cuidarla hasta arriesgar mi propia vida.


No hay comentarios:

Publicar un comentario